Perdió la visión de la virgen que se contorneaba ante ella debido al calor sofocante,  una mujer cruzo la calle con una mantilla puesta y se gano la mirada de la chica  fascinada por los colores vivos que lucia aquella figura que desaparecía lentamente calle abajo.

Se dirigió hacia una esquina atraída por una especie de gritos sincopados que venían de algún lugar que todavía no distinguía, al llegar observo como la misma mujer hacía un ritual de tipo mágico-religioso, estaba situada enfrente de un rótulo en el se leía Santa Burg.

Entró atraída por lo prohibido.

Rompiendo de un estallido  silencioso la fórmula local trendy mas burgers gourmet, surge el Santa rodeado del misticismo de barrio rozando lo religioso, barra , mesas, televisor en technicolor trasmitiendo el  fútbol  y la virgen al fondo, observando a la gente desatando su pasión, comiéndose sus píldoras sagradas de foie ( deluxe – foto –  ), chik ( de pollo ), Beef ( de rost beef arrebato brit ) por nombrar algo sagrado.

Desde la euforia pagana, la locura irracional, el súbito entusiasmo del que sueña con palmeras a mediados de invierno, hoy la Santa es insuperable, la obra suprema a ojos de la virgen.

Al salir del santuario se cruzó con alguien fantasmagórico que tarareaba un estribillo :

Santos que yo te pinte, demonios se tienen que volver

Sergi Barnet

SaveSave

Contact
Santa Burg
Vallespir 51 BCN
936 76 39 74 http://www.santaburg.com/