Oler a café y a pan

La vuelta a la rutina nos lleva sin remedio a retomar nuestros hábitos, tanto los que más nos cuestan, como trabajar o el gimnasio, como aquellos de los que más disfrutamos y entre ellos está, sin duda, un buen desayuno.

Nuestros pasos nos llevan al que, en los últimos meses, se ha convertido en uno de los templos del café de especialidad en Madrid, Pum Pum Café. Un espacio diáfano en la calle Tribulete dónde predomina el ladrillo, la madera y las plantas, además del irresistible olor del buen café y los mejores panes (de “Madre hizo pan”) y dulces.

Aquí se come vegetariano y muy rico. Entre las distintas opciones para cualquier hora del día (de 9:00 a 20:00) se encuentran sus tostas, burgers, ensaladas o brunch, pero nuestro plato preferido por excelencia es el “Benedict pum pum”: una tosta con aguacate, huevo benedict y la más deliciosa salsa holandesa. La parte dulce la completan alfajores, medias lunas y bizcochos de diferentes sabores. Todo hecho allí, en la casa.

Dicen que la gentrificación ha llegado al barrio pero no confundamos términos. Aquí el producto es de primera, los vegetales y frutas orgánicos, los zumos naturales, la leche fresca de la sierra de Madrid, apuestan por comprar en los negocios del barrio y su café sale de pequeños tostadores locales.

Nosotros seguimos disfrutando de nuestro café y nuestra lectura, celebrando la llegada y permanencia de proyectos como este, que son los que nos gustan.

Cristina V.
Fotos: Sergi Barnet

Contact
Pum Pum Café
C/ Tribulete 6 Madrid
(Lavapiés)