Libertine

Si estás harto de los típicos bares, cafeterías, restaurantes o coctelerías con mesas de madera, paredes blancas y sencillez nórdica, este nuevo espacio en Barcelona, será tu perdición.

En Libertine -encuéntralo en Casa Bonay, una vez traspases la jungla en forma de corner cafeínico de Satan’s-, todo vale. Aquí puedes empezar el día -Marcos te servirá su particular visión del desayuno-, tomar un tentempié, comer, cenar, merendar o terminar el día a base de copazos.

La carta, capitaneada por Estanis Carenzo -Chifa, Sudestada-, es simple pero eficaz. Empieza con Ocho cosas buenas para picar -a destacar la escabeche de calabaza, sus quesos ‘buenos’ o las bravas-, y continúa con los Ocho platos clásicos revisitados como la ensalada griega con tomates, pepinos, cebolla roja olivas y feta; la hamburguesa; el sandwich club o el plato de cuchara del día que, como su nombre indica, va según la temporada. Si te quedas con ganas de más, los postres no defraudan. Y por si esto no fuera ya suficiente, la larga carta de cocktails consigue que alcancemos el éxtasis.

Aquí puedes ser tu mismo y disfrutar de sus propuestas en cualquier momento del día. ¿Que te apetece bailar? ¡Pues baila! ¿Comer? ¿Beber? ¡Pues dale! Ellos mismos lo dicen, Libertine es una ‘Casa de comidas, bebidas y bailes’ así que, déjate llevar por el lado más misterioso de Casa Bonay.

Laura Hernandez
Fotos: Cecilia Diaz Betz