Soy de las que piensan que hay una ley no escrita, más bien innata en nuestras apetencias, que dice que hemos sido hechos para que nos F L I P E L A P I Z Z A. ¿Me equivoco? No, ¿verdad?
Lo mío roza el amor eterno porque indudablemente soy una P I Z Z A H O L I C pero aquí y ahora, he venido a hablar de P I Z Z A O L O S. Es decir, de aquellos que dominan el arte culinario de este manjar con denominación de origen italiano. Expertos en la receta de la deliciosa pizza napolitana.
Pues no hace mucho en la playa de El Campello, se ha instaurado Infraganti Pizza bar. Un proyecto de Raquel y Gonzalo, dos amantes pizzeros reconocidos que tras viajar y probar las mejores del mundo, han querido enseñarnos que hay otro tipo de pizza a los alicantinos. Una pizza hecha con masa madre y de fermentación larga que hace que sea más ligera, saludable y literalmente, te mueras de gusto al comerla.
Su maestro inspirador para traernos este concepto de pizza no ha sido más que el mejor pizzaolo del mundo: Franco Peppe. Si ese hombre que ha puesto el pueblecito italiano de Caiazzo en el mapa y ha hecho que sea un lugar de peregrinaje para quienes la pizza es una forma de arte. Éste encima, les ha visitado hace poco y han podido disfrutar y cocinar sus creaciones de primera mano en su horno.
Así que, era irremediable que quisiera ir con todas las fuerzas del mundo y allí nos plantamos mi compi y yo, a catar de primer mordisco estas pizzas. Tuvimos la suerte que nos recibiera al propia Raquel y nos dedicara todo el tiempo del mundo a contarnos todos los detalles de Infraganti. Desde revelarnos el tiempo de fermentación necesarios para conseguir que tenga una digestión ligera, a su apuesta segura por proveedores cercanos. Promoviendo, además de la calidad de los productos, su proximidad y sostenibilidad. En otras palabras, una dieta mediterránea de sabores naturales muy de aquí.
Todo eso era más que evidente si mirabas alrededor. La cocina abierta con los pizzaolos amasando las masas, horno encendido en una esquina y el aroma a recién hecho y casero que te obliga a ver la carta para pedir las que serán las primeras de muchas más.
La carta de Infraganti presenta tanto las recetas más clásicas como las creaciones más creativas. Nosotras buenamente nos dejamos aconsejar y probamos la pizza Margherita (asignatura obligada en toda pizzería que se aprecie) y la De la Vecchia, porque había que probar esa ricotta y mortadella con pistacho y ralladura de limón. Además de una novedad, que me fascinó y me declaro ya ultra fan: una delicatessen con higos. A lo que se le sumo una ensalada de Crucíferas y un hummus meloso, que hizo que nos pegarnos un festín de aupa.
Sin nada más que añadir, que como ellos mismos dicen, “Amor a primera pizza” y de verdad de la buena.
Pics by Queridamaldita
