Tengo la sensación que he llegado a otro sitio, que he viajado y no me he dado cuenta, que estoy en el Norte y no en el Levante. Miro a la Basílica y me ciega un rayo de sol. Menos mal que el clima ilicitano me libra de ésta tonta confusión. Yo, que me creía con la certeza de conocerlo todo en mi ciudad de repente me encuentro un trocito de Asturias en pleno Elche. Es que cogerte de la mano y pasear juntos nos ha llevado a miles de sitios y hoy hemos llegado a Casa Zarracina.
A lo lejos ya te veía mirar curioso por encima de las gafas de sol esa terracita. Dices que no pero te pasa como a mí. Si es bonito, te hace. Si hay armonía, te encanta. Aunque hay mesas fuera entramos a preguntar sitio, y no lo niegues, a cotillear. Un sinfín de detalles adornan las paredes, la barra, las estanterías y el comedor. Se nos van los ojos por toda esa decoración tan detallada y hogareña. Te miro a la cara y veo que te da igual dónde sentarte pero es que a mí más. Quiero comerme el norte ya.
Casa Zarracina es la nueva Sidrería de los mismo dueños de la que estaba ubicada en la calle Olivereta. Todo aquel ilicitano y errante de todo tipo puede saber de dónde hablo. Pues en estos años con su saber hacer y cocinar se han ganado un huequillo en el corazón y el estómago de muchos. Éste nuevo local nace de las ganas de crecer, de ofrecer una carta más amplia y de hacer un pequeño homenaje al tataraabuelo de la cocinera y dueña, Tomas Zarracina creador de la Sidra Champagne Zarracina que es la más antigua de España.
Esto es un restaurante de buen comer, de comer caliente como diría tu señora madre. De esa que alimenta bien con platos caseros bien contundentes. Con una carta que varía en función de las estaciones del año pero siempre demostrando que en el norte no se andan con tonterías y aquí aún menos. Quesos, embutidos y carnes de res traídas desde el propio Principado. Pesca y verdura fresca de la zona para elegir. Y que no falte la rica Sidra asturiana para escanciar en cada mesa.
Son manjares de allí que podemos disfrutar aquí. Ahora sólo quiero que venga el frío para probar su famosa fabada pero mientras tanto me relamo y no te dejo probar queso alguno.
PatriciaTedaTiricia
Pics by Antonio Galealba
