Madrid en estado puro

Siempre recordaré el Café Comercial como uno de los primeros puntos que fui capaz de ubicar en el callejero madrileño, cuando aún no unía los barrios de la ciudad y me perdía en el metro. Recuerdo la fascinación que me producía cruzar su puerta giratoria e imaginar cuantas historias se habrían vivido allí, cuántas tertulias de media tarde y cuántas personas se habrían sentado en ese mismo sillón. Y así pasaban las horas con mi café y mi sándwich mixto, que era lo que solía pedirme para desayunar.

Supongo que no soy la única que lo recuerda así, por eso no es de extrañar que el día que cerró sus puertas, una avalancha de mensajes de cariño se apoderase de sus cristales, porque el lugar era un poquito de todos y así lo sentíamos. Y con ese sentimiento de pertenencia esperamos con algo de recelo su reapertura, como si tuviéramos miedo de que nos lo cambiasen demasiado y se perdiera algo de su esencia. Así que nos alegramos cuando descubrimos que Madrid in Love había sabido respetarla y nos seguíamos reconociendo en el nuevo Café que tenía lo más importante del antiguo, mantenía su alma.

Hoy nos sentamos en su comedor principal a probar su carta, castiza como no podría ser de otra manera y donde el chef Pepe Roch ha hecho que el producto de Madrid prevalezca. Probamos su sardina ahumada con tomate estrujado y encurtidos (una auténtica delicatesen que tienes que probar), las bravas con alioli de madroño (que pasan directas a nuestro top), el canelón de rabo de toro (simplemente brutal) y los chipirones salteados con albahaca, sésamo y alioli de manzana (perfecto final salado). Claro que aún tenemos reciente la Semana Santa y no pensamos irnos sin probar su torrija con helado de violeta con la que nos faltan las palabras.

Gracias Café Comercial por seguir ahí, haciendo de Madrid nuestra casa, esa cuyos clásicos jamás nos fallan.

Cristina V.

 

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Cafe Comercial
Glorieta de Bilbao 7
Metro Bilbao.
Precio persona: 30 € aprox. 
http://cafecomercialmadrid.com/