C/San Francisco nº12
Alicante 865600557
www.laneuhelados.es/
Voy a ponerme guapa que tengo una cita. He quedado en y con una heladería. Suerte la mía, no con una cualquiera, sino con una que por fin trae a Alicante un nuevo concepto de entender ese dulce tan adictivo. Mi cita es en y con la heladería Laneu, con una tarrina de helado tan fresco como yo.
Me pinto los labios mientras que voy caminando por una de las calles más absurdamente emblemáticas de la ciudad. Menos mal que por fin llego a un local que llama la atención por su sencillez. Un entorno minimalista dónde cada cosa ocupa su lugar perfecto. Me alegra ver que no me encuentro con estridentes montañas de helado. Ante eso, me encuentro con un mostrador cuatelosamente ordenado por sus diferentes productos bastante coqueto.
El culpable de mi cita es el propio creador de esta heladería, Jorge Sirvent. Un joven emprendedor de Xixona que me presenta su idea de ofrecer un producto auténtico, sencillo y natural. Un producto que no se complica con aditivos, colorantes, conservantes o aromas. Un producto que es elaborado a diario en su obrador a la vista, dentro del propio local y de la manera más natural posible. Pues utilizan menos materia grasa y azúcares, usando leche fresca de una vaquería cercana y productos ecológicos. Un producto que se conserva en la temperatura de -12ª para ser degustado, siendo la perfecta para que sea más cremoso y más sabroso.
Juego un poco con los mechones de mi pelo mientras que voy flirteando con los diferentes sabores. Me encuentro tanto con los tradicionales de siempre, los frutales y los cremosos: limón, fresa, vainilla, stracciatella, cheesecake y las variantes para los amantes del chocolate; así como con algunos totalmente desconocidos que me encandilan con su nombre: el Caramelo a la sal o Crema Laneu, una creación propia basada en un turrón de Xixona de almendra tostada. Pero finalmente, los elegidos para mi cita son el helado de Pistacho y de Leche Preparada. Dicen los expertos que el sabor del pistacho pueden sentenciar o potenciar la categoría de una heladería.
Cuchara tras cuchara compruebo feliz esa cremosidad auténtica mientras que me divierto leyendo el mensaje de mi tarrina. Aquí, cada vaso, cada tarrina de su packaging biodegradable y reciclable tiene un trocito de su manifiesto. Cuchara tras cuchara pienso que acaba de nacer una bonita amistad que puede llevar a más. El tiempo lo dirá aunque yo ya digo que voy a ser de los que comen helado todo el año.
PatriciaTedaTiricia
Fotos -> Pati Gagarin