Me toca a mi, la historia de una de mis locuras. A menudo fantaseas a cerca de como podrías estar en otra ciudad instantáneamente, o de como ir al aeropuerto y comprar un vuelo al azar porque simplemente te apetece !
Pues bien esto es posible hacerlo en tu propia ciudad, sabiendo escoger donde ir. Uno de esos sitios es el Bar Tarambana, en un domingo cualquiera después de hacer el vermú en el Morro FI bajamos escasos metros y nos dejamos seducir por el espacio, unas grandes cristaleras perforadas por el sol del mediodía nos proyectan a un bienestar que complementa la decoración industrial pero a la vez cálida del lugar ( muy Brooklyn ), parket oscuro muy vintage, mesas de madera xxl para compartir y pequeños oasis para conectar tu mac ( obvio ) o leer.
Ideal para hacer un brunch, o comer tostadas de un pan riquísimo acompañada de unos productos de buena calidad, una merienda con sus pasteles del día ( en una ocasión tenían ensaimadas de Mallorca recién llegadas ) o alargar la noche con unas copas ( cierran a las 3.00 los viernes y los sábados ).
Las locuras acaban por desaparecer y aparecer en tu ciudad. El Tarambana ha nacido para darnos píldoras de felicidad siempre que lo visitemos.
SaveSave